La cooperativa cumple 50 años de labor solidaria, que ya cuenta con 60 agencias en el país.
Una conversación informal entre dos empleados de Sofasa, en 1972, que se originó por necesidades de obtener préstamos para atender necesidades básicas, se terminó convirtiendo en una de las cooperativas más grandes del país: Confiar.
Rosendo Alberto Saavedra, uno de los trabajadores de la ensambladora en aquel tiempo, contó: Se nos enfermaba la esposa, no hay plata, arranque para una cooperativa que había y entonces allá nos prestaban $50. Entonces había un señor, Fermín Pinillos, que dijo: ‘nosotros le estamos dando la plata a Coopetraban, formemos nosotros una cooperativa’. Entonces, la idea quedó vagando. En julio de 1972, por ahí a las 10:00 de la noche, dijimos, ‘hombre, vamos a hacer la cooperativa´”.
Y con aportes que estaban entre los $1.000 y $1.500, 33 empleados de Sofasa lograron recolectar $15.000 y dieron vida a la Cooperativa de Trabajadores de Sofasa (Cootrasofasa). Durante sus primeros 10 años, esta entidad se dedicó a recaudar los dineros de sus asociados y llegó a tener 500, quienes hicieron de estos aportes una fuente para créditos.
El giro de una cooperativa empresarial a una gran entidad solidaria comenzó en 1982, coincidiendo con la llegada de Oswaldo León Gómez Castaño, cuando empezó con el proyecto de expansión, iniciando por la primera sede externa a la compañía, en el edificio La Ceiba, en el centro de Medellín. En 1984 no solo salió del Valle de Aburrá, sino de Antioquia, con su primera sede en Boyacá, más exactamente en Duitama.
Paralelamente con este crecimiento corporativo, se presentó el de las garantías para sus asociados. Nacieron los planes funerarios, los derechos a programas recreativos, atención en salud, entre otros servicios adicionales a los créditos que se ofrecían.
Y este crecimiento obligó a un cambio de imagen y nombre en 1985, cuando pasó a llamarse Caja Cooperativa de Trabajadores y en 1992 adoptó el nombre de Confiar Caja Cooperativa y en el 2003 ya se llamó Confiar Cooperativa Financiera.
La expansión actualmente llega a las 60 agencias en nueve departamentos del país: Antioquia, Caldas, Quindío, Risaralda, Boyacá, Cundinamarca, Valle del Cauca, Meta y Casanare.
En cada una de estas regiones les ha cumplido los sueños a las 385.000 personas que integran esta cooperativa, entre asociados y ahorradores, sin importar si tienen trabajos de altos ingresos o son informales.
Marisol Villegas, una vendedora informal de Tunja, Boyacá, pudo conseguir su casa gracias a Confiar. “Le debo mucho a confiar porque he surgido mucho, por decir, mi apartamento, algo que uno de pobre lo ve muy lejos. Yo solo pensaba cómo iba a reunir $50-60 millones, pero Confiar se los entrega a uno y le dice, ‘mire a ver, trabaje’. Y cuando uno cumple, Confiar le sigue abriendo más puertas, y más, y más’”.
Son 50 años de recorrer un camino que aún tiene mucho por recorrer, pero siempre de la mano de aquellos que la transformaron de una cooperativa empresarial a una de las entidades solidarias más grandes del país, porque, como dice su eslogan, “El futuro es Confiar”
Tomado de: elcolombiano.com